Un estudio sugiere que las siestas regulares durante el día podrían ayudar a mantener el cerebro más joven hasta 6,5 años.
Un estudio demuestra que las siestas diurnas reducen el envejecimiento cerebral en 6 años y aumentan el volumen cerebral. Tomar siestas regulares durante el día podría contribuir a algo más que a recargar energía: podría mantener el cerebro más joven.
Si bien algunas investigaciones indican que las siestas cortas pueden mejorar la cognición, aún no se ha identificado una relación causal directa entre las siestas y la salud cerebral.
Un nuevo estudio realizado por investigadores del University College London (Reino Unido), la Universidad de la República (Uruguay) y el Instituto Broad (Massachusetts) utiliza una técnica de análisis para determinar las relaciones causales.
El nuevo estudio investiga una posible asociación entre la predisposición genética a las siestas y el volumen cerebral, un indicador de la salud cerebral.
Los autores del estudio analizaron datos de 378.932 participantes del Biobanco del Reino Unido. Los participantes tenían una edad promedio de 57 años, con edades comprendidas entre los 40 y los 69 años.
Entre estos participantes, los investigadores buscaron individuos con las 92 variantes genéticas previamente identificadas como asociadas con la siesta habitual. También evaluaron el volumen cerebral, el volumen hipocampal, el tiempo de reacción y la memoria visual de las personas con estos marcadores genéticos. La técnica de aleatorización mendeliana (fuente confiable) reveló las relaciones que reporta el estudio.
Los investigadores descubrieron que las personas con estas características genéticas tenían mayor probabilidad de tener un mayor volumen cerebral. La pérdida de volumen cerebral se asocia con la neurodegeneración en forma de atrofia causada por la muerte celular, por lo que un volumen cerebral robusto se considera un signo de salud.
El estudio se publicó en Sleep Health.